sábado, 17 de enero de 2015

Begin again Capítulo 8: Sobrevivir.




-¡Tienen que hacerlo!-

-¿Por qué? ¡A ti te gusta ese chico, a mi no!-

-Yo te conseguí las entradas, no me pidas más-

-Me da vergüenza ir solo con él, si están ustedes no seré tan obvio-

-JongDae, tú eres la persona más obvia del mundo. No puedes evitarlo, mejor aún, acéptalo y sé tan obvio que Minseok tenga que darte una respuesta-

-Necesito apoyo, no que me restrieguen en la cara lo patético que soy-

Estaban los tres, Baekhyun, Kyungsoo y JongDae en la casa del segundo, sentados en el sillón con algunos cuadernos en sus regazos. La idea era estudiar algunos conceptos de un examen que se veía difícil antes de que se les viniera demasiado encima, pero entre amigos no siempre funciona eso de estudiar.

Por eso ahora se encontraban discutiendo sobre el concierto al que JongDae y Minseok irían, al de Dong Bang Shin Ki. Cuando el mayor vio lo que JongDae le estaba regalando casi, casi lo besa de la emoción, JongDae no obtuvo un beso pero el mayor lo abrazó tan fuerte y su sonrisa era tan brillante que fue más que suficiente. Minseok le rogó que lo acompañara para que sus padres no le hicieran mucho drama y él aceptó, por supuesto. Minseok le repitió hasta el infinito que cualquier cosa que JongDae le pidiera él se lo concedería por haber conseguido algo tan complicado e importante para él.

Pero…

JongDae no quería ser el único acompañante de Minseok y tenía buenas razones. Número uno, le daba vergüenza estar tanto tiempo con el mayor y temía quedarse sin tema de conversación. Segundo, los tickets de prensa tenían derecho a estar al frente, pero por la distribución de los asientos eso significaba estar en la zona V.I.P de pie, en otras palabras, hacer fila de horas para quedar en buenas posiciones. Tercero y más importante: Las fans le daban miedo.

-JongDae, el mejor momento para conversar de cualquier estupidez que se te venga a la cabeza es cuando estás en una fila para un concierto. Además de que te haces amigos con los que están alrededor- Le dijo Kyungsoo con un tono experto. Obvio, ¿cómo no serlo cuando JongIn lo obligaba a ir a los conciertos de Shinhwa? Y esas fans sí que daban miedo, aunque debía admitir que fue muy divertido conocer a la gente además de liberar su estrés a codazos para acercarse al escenario.

-Kyungsoo tiene razón, lo único de lo que tienes que preocuparte es que Minseok tenga su centímetro cúbico de la vida- Aportó Baekhyun volviendo a sus apuntes.

-¿Centímetro cúbico de la vida?- Preguntó JongDae sin entender a qué se refería.

-Recuerda el código de las fans: “Mientras más cerca mejor, no importa si la persona de al frente está muriendo aplastada, si puedes avanzar, avanza.”- Recitó Baekhyun, aunque aquel código no existiera realmente.

-¿Muriendo aplastada?- Volvió a preguntar JongDae comenzando a ponerse pálido.

-Bueno, no morir, tendrías que estar en un concierto de H.O.T con Shinhwa, Dong Bang Shin Ki, Super Junior, Big Bang y Girl’s Generation juntos para morir- Explicó Kyungsoo –Pero siempre puedes desmayarte, especialmente si estás contra la reja entre el escenario y las fans-

-¿Y qué pasa si me desmayo?-

-Los de seguridad te sacan como pueden y te llevan con una ambulancia, si tienes suerte quizás puedas volver al concierto antes de que termine- JongDae tomó una almohada y comenzó a pegarse en la cabeza contra ésta, maldiciendo su estupidez al meterse en la boca del lobo –Pero tú tranquilo, no creo que Minseok sea tan fanático como para querer estar muy cerca-

-Es parte del fan-café-  Dijo JongDae mientras seguía golpeándose con la almohada.

-Eso no es tanto- Dijo Baekhyun.

-Ha ido a todos las firmas de autógrafos, fanmeeting y tiene toda su discografía- Continuó JongDae.

-Bueno, quizás le gusten bastante pero no creo que… -Kyungsoo fue interrumpido por JongDae.

-Tiene el número de teléfono de tres de los miembros y unos calzoncillos usados por Hero Jaejoong-

-Oh mierda, ¡Minseok hyung es un Sasaeng!- Exclamó Kyungsoo con la boca abierta y sus ojos se veían más grandes de lo normal. Baekhyun se había levantado y se encontraba corriendo en círculos sin saber cómo reaccionar -¿Sabías que se cree que los Sasaeng son enfermos mentales?-

-¡Cállate!- JongDae por fin dejó de golpearse con la almohada, para la alegría de sus neuronas –Sé que es obsesivo y que está invadiendo la privacidad de alguien y que lo mejor sería no llevarlo al concierto… -

-Eso lo que una persona con dos dedos de frente haría- Dijo Kyungsoo asintiendo. JongDae lo ignoró.

-Pero su carita tierna de baozi se veía tan hermosa y violable cuando me contó que no había conseguido las entradas que pensé que si las tenía su carita tierna de baozi se vería más hermosa y violable- Explicó mientras ponía sus manos en sus mejillas a la vez que cerraba los ojos y se sonrojaba al revivir la imagen en su mente.

-O sea que no estás pidiendo que te acompañemos a morir aplastados sólo porque te da vergüenza estar junto a Minseok, quién por cierto es un Sasaeng, y todo porque le conseguiste –mejor dicho, te conseguimos- las entradas para ver su cara de felicidad y orgasmearte con la imagen- Resumió Kyungsoo cruzándose de brazos. JongDae asintió.

En esos momentos entró JongIn seguido por Sehun.

-¿Alguien dijo algo de orgasmo?- Dijo el rubio mientras tiraba su mochila al suelo y miraba a Kyungsoo sugerentemente.

Con la palabra “orgasmearte” Sehun se había olvidado de todo lo que había pasado en el día.

Aún era “el chico nuevo” del salón, sólo llevaba una semana pero se sentía más cómodo con cada día. Se hizo cercano a Tao quién era muy agradable y le ayudaba a ponerse al día con las materias, pero su meta era acercarse a Kai, sólo que el moreno era increíblemente escurridizo. Desde la profesora de lengua, a la que le coqueteaba a penas la veía, hasta jugar cartas con el chico tímido que siempre estaba leyendo, Kai parecía no tener tiempo para él. Las pocas veces que hablaban, Kyungsoo era el único tema de conversación, ya que Sehun no podía contenerse a desquitarse con la única persona que parecía conocer a Kyungsoo en el salón el hermoso cuerpo de su hyung y lo violable que se ve al dormir, además de intentar poner celoso a Kai, porque Sehun no era ningún rogado.

 Pero ese día se quejó en voz alta el hecho de que se le olvidaron las llaves y que quizás Kyungsoo no estuviera en casa.

… Y entonces pasó el milagro…

Kai se le acercó con una sonrisa y le dijo que lo acompañaría a su casa, así podrían esperar a Kyungsoo juntos. A Sehun le pareció una propuesta encantadoramente caliente, casi una propuesta de sexo en bandeja de plata. Se fueron juntos todo el camino mientras hablaban de cualquier cosa, según Sehun se compartían sonrisas y miradas cómplices, en realidad hablar de los grupos idols  femeninos era un magnífico tema entre dos hombres. Rogó que Kyungsoo no estuviera en casa, pero se sorprendió cuando Kai sacó un llavero con forma de nube y abría la puerta con toda la normalidad del mundo.

La sorpresa le duró poco, porque escuchó la palabra “orgasmearte” saliendo de la boca de Kyungsoo y eso fue demasiado para su mente pervertida.

Su primo le mandó una mirada asesina, le respondió con un beso volador que provocó una mueca de desagrado en el mayor.

-Siguiendo con el tema, ¿Con quién irás al concierto de Dong Bang Shin Ki?- Dijo Baekhyun antes de que el rubio hiciera algo muy perturbante para Kyungsoo y el conejito de JongDae saliera al rescate.

-Iré con la persona que más me ame en el mundo- Respondió JongDae mientras le hacía ojitos a sus amigos.

-¿Con tu mamá?- Tanto Baekhyun como Kyungsoo rieron mientras JongDae sonreía entre divertido y avergonzado.

-¿Vas a algún lado hyung?- Le preguntó Sehun a Kyungsoo mientras se hacía espacio entre éste y Baekhyun, poniendo su brazo detrás de su primo.

-No, solo un idiota iría a un concierto de Dong Bang Shin Ki con un Sasaeng y un tonto enamorado sin experiencia en conciertos- Dijo Kyungsoo mientras tomaba el brazo de Sehun y lo sacaba de sus hombros, el rubio volvió a ponerlo.

-¿Quién es un Sasaeng?- Preguntó JongIn mientras terminaba de bajar las escaleras. Se había cambiado el uniforme por ropa cómoda y bastante sexy, la ropa que ocuparía un bailarín de un grupo famoso. Era un pantalón negro, holgado a la altura de los muslos que se volvía más ajustados a medida que llegaba a los pies, también llevaba un polerón negro con un estampado de manchas en colores fuertes. Sehun se fijó en sus zapatillas que eran bastante costosas y se veían muy usadas.

-Minseok hyung-

-¿En serio?- Preguntó sin creerlo mientras se adentraba a la cocina. -¿Y a quién persigue?-

-Adivina… - Le desafió Kyungsoo sonriendo aunque JongIn no podía verlo.

-¿Dong Bang Shin Ki?- El moreno salió con algunas frutas y galletas caseras en una bolsa plástica que puso en su mochila. Todos asintieron. –Oh, mierda. Me siento culpable-

-¡Puedes remediar eso acompañándome al concierto para controlar los instintos psicópatas de Minseok!- Se apresuró en decir JongDae levantándose y corriendo hacia JongIn mientras juntaba sus manos y las ponía sobre su pecho.

-Bueno, ¿Por qué no?- Aceptó el moreno asintiendo. Todos lo miraron con los ojos bien abiertos, ni siquiera JongDae pudo creerlo, aunque a penas procesó la información comenzó a bailar y darle las gracias al dios de los bailarines sensuales (Bi Rain) por darle esa oportunidad de sobrevivir. En cambio Kyungsoo se levantó y dando un pisotón muy fuerte llamó al silencio.

-¡Tú irás a ese lugar sobre mi cadáver! ¿Entendiste niñito inmaduro?-

-------------------------------------------------------------

-No puedo creer que esté haciendo esto-

El plan era simple, Kyungsoo iba antes que los demás para correr y conseguir puestos seguido de Minseok y su amigo Luhan mientras JongIn y JongDae intentaban retener con sus cuerpos a la marea de fans eufóricas.

-Oh vamos, admite que la adrenalina te dice que es lo más divertido que harás en mucho tiempo- Le dijo Minseok mientras sonreía, Luhan detrás de él sonreía mientras asentía. -¡Por el pene de Yunho, abrieron las puertas!-

Había unas cien personas antes que ellos para entrar a la zona V.I.P. Antes de entrar los guardias revisaban la entrada y la mochila de una persona, por lo que era un proceso lento. Inteligentemente, las mochilas las llevarían JongDae y JongIn para hacer tiempo (y espacio) mientras los otros conseguían un buen lugar. Kyungsoo comenzó a calentar en su lugar y a recordar todas las técnicas de sobrevivencia en los conciertos.

Llegó su turno, pasó la entrada, levantó los brazos mostrando que no tenía nada extraño y a penas pudo corrió hacia el interior del recinto. Se quedó sorprendido por lo enorme del lugar pero al escuchar los pasos de Minseok siguiéndolo volvió a la realidad corriendo hacia la masa que se encontraba concentrada en el centro del escenario. Había una pasarela larga, pero el objetivo de Kyungsoo era definitivamente una de las esquinas entre la pasarela y el escenario principal, ahí podrían ver todo ya que si los artistas caminaban por la pasarela los verían pasar y después los verían por las pantallas gigantes al frente suyo. Había unas ocho personas que lo separaban de la barrera, suspiró y tomó la mano de Minseok con fuerza.

-Si quieres vivir, no sueltes mi mano- Le advirtió- ¡Jonghyun! ¡Jonghyun dónde estás!-

La milenaria técnica de “estoy buscando a alguien, hagan espacio” funcionó a la perfección para que se adentraran en la masa, además de algunos codazos descomunales que Kyungsoo proporcionaba. Kyungsoo logró llegar a la barrera, importándole una mierda la moral de que los hombres a las mujeres no les deben pegar y esas cosas empujó con su cuerpo a algunas fans, haciendo espacio para que él, Minseok y Luhan lograran estar pegados a la barrera. Sintió unos brazos rodeándolo, miró hacia atrás y pudo ver la sonrisa de JongIn.

-¡Lo logramos hyung!- Chocaron los puños.

Estaban en la esquina entre la pasarela y el escenario, al frente estaban Kyungsoo, Minseok y Luhan uno al lado del otro, JongDae y JongIn estaban detrás de ellos haciendo de barrera para que las otras fans no los aplastaran. El orgullo de Kyungsoo se elevó hacia el cielo por realizar aquella hazaña.

El héroe del momento se dio media vuelta para quedar frente a JongIn para conversar, porque quedaban como dos horas antes de que comenzara el concierto. En realidad acompañó a JongIn por dos motivos, primero para que saliera vivo y segundo para que no estuviera tocando el violín más pequeño del mundo haciendo mal tercio entre JongDae y Minseok, pero no le había salido muy bien la idea porque estaba Luhan, a quién por cierto nunca había visto en su vida.

-Oye, Minseok hyung- Llamó en voz alta por el ruido -¿De dónde conoces a Luhan hyung?-

-Lo conocí mientras hacíamos la fila- Respondió inocentemente.

JongDae casi le daban ganas de pegarse un tiro, pero no lo hizo y siguió mirando como su Minseok conversaba animadamente con Luhan sobre los calzoncillos y calcetines de cada miembro que ambos tenían.

-Son un poco raros- Le dijo JongIn a Kyungsoo al oído. No tuvo necesidad de susurrar, con decirlo a un volumen normal solo escucharían ambos por el ruido que había. El mayor asintió y suspiró algo cansado -¿Qué sucede?-

-Todas estas cosas me están superando, estoy algo cansado. Además que tengo que comenzar a ver universidades y todo eso- Le dijo al oído. JongIn lo abrazó con un brazo mientras que con el otro se afirmaba de la barrera para no aplastar al mayor. –Pero no te preocupes, hyung estará bien-

-Eso espero, si necesitas algo puedes contar conmigo- Kyungsoo sonrió y acarició la nuca del moreno con sus dedos.

-Con que estés cerca es suficiente, tú también estás ocupado. ¿Ya sabes si vas a aparecer en un video?-

-Mañana nos dicen, pero según algunos rumores Taemin y yo seremos los protagonistas, pero no lo creo- Le reveló aunque se supone que era información confidencial, pero era Kyungsoo, no le podía ocultar nada.

-¿Y tu hermana? ¿Cómo esta?-

Lamentablemente el novio de Soojin había rechazado a su hijo y le dijo que aunque la quería mucho no se sentía preparado para ser padre. La chica estuvo llorando por varios días y se negó a volver a la universidad hasta que hubiera dado a luz. Sus amigas la visitaban pero se notaba lo afectada que estaba.

JongIn adoptó el rol de conseguir los antojos de su hermana quién amaba con toda su vida las galletas que hacía Kyungsoo, así que por lo menos tenía excusa para pasarse por la casa de su hyung favorito y pedirle galletas –o robarlas en su defecto-. Aunque a pesar de pasar bastante seguido en la casa del mayor, Sehun nunca lo veía. Eso era una suerte porque a JongIn le hervía la sangre cuando el rubio le contaba lo hermoso que se veía Kyungsoo la noche anterior y el conejito de JongDae llegaba a temblar del miedo cuando Sehun mencionaba lo bueno que estaba JongIn.

Si supiera…

-Está bien dentro de lo posible- Respondió el moreno. En ese momento la fuerza de decenas de fans hicieron que JongIn se pegar mucho a Kyungsoo, haciendo que se sujetara con ambos brazos contra la barrera para así no aplastar al mayor.

-Déjalo, tenía que pasar en algún momento- Le dijo mientras hacía que JongIn dejara de apoyarse en la barrera, entonces quedaron muy pegados, Kyungsoo entre JongIn y la barrera, JongIn entre Kyungsoo y las fans locas –Hemos estado más pegados que esto ¿Lo olvidaste?-

JongIn negó, y agradeció a los cielos ser hombre y ser tan alto porque de lo contrario se habría sentido como una hormiga en aquel lugar. Entrelazó sus manos con Kyungsoo y jugaron a acariciárselas mientras esperaban pacientemente a que comenzara el concierto.

-Ya van tres personas desmayadas, debe faltar poco-

--------------------------------------------------------------------------------

El mundo de Kyungsoo se derrumbó cuando su padre le dio la noticia de que su hermano había muerto en el parto. Su madre aún no sabía porque tuvo complicaciones antes del momento y tuvieron que sedarla completamente.

El joven lloró en los pasillos del hospital, aquel día que prometía ser el más feliz se volvió una pesadilla.

Cuando su madre despertó y le contaron la noticia no actuó como su hijo, solo sonrió tristemente y limpió las lágrimas de su único hijo.

Kyungsoo quería tanto a ese pequeño, tanto. Aunque no lo podía ver buscó un montón de información para que creciera lo más saludablemente posible, también decoró el cuarto con ayuda de su padre.

Cuando abrió la puerta y vio aquel cuarto pintado de celeste con nubes y aviones de colores sintió que la realidad le daba un golpe bajo. La cuna blanca, las pequeñas sábanas esperando a ser ocupadas, la cajonera llena de ropa pequeña, los zapatitos, los juguetes en una caja, los peluches que estaban en el marco de la ventana…

Abandonó el lugar de un portazo, prometiéndose nunca volver a entrar a esa habitación. Se encerró en la propia, tirándose a su cama boca abajo y queriendo desaparecer del mundo.

Porque ese bebé no solo era su hermano, era la última esperanza de que el matrimonio de sus padres se salvara. Aquella relación no daba para mucho más, pero con un bebé su padre no se atrevería a dejarlos por mucho tiempo.

El padre se Kyungsoo amaba a su hijo, pero Sora era tan irresponsable que no podía aguantar las ganas de gritarle y repetirle una y otra vez lo inútil que era. Mientras el padre de Kyungsoo viajaba por su trabajo y volvía con grandes cantidades de dinero destinadas a la crianza de su hijo, Sora se dedicaba a salir con sus amigas sin importarle mucho si es que Kyungsoo hubiera llegado a casa o no.

Uno de los golpes más fuertes que recibió Kyungsoo fue cuando le preguntó a su madre si podía comprarle un abrigo nuevo, porque el que tenía no era suficiente para los días invernales del año. Su madre respondió que no, que no tenía dinero, pero tres días después llegó a la casa sonriente mientras sostenía unas bolsas de ropa costosa y al día siguiente a ese modeló unos zapatos de tacón nuevos el doble de costosos de lo que hubiera costado un abrigo para Kyungsoo.

Ahora con la muerte de su hermano menor solo le esperaba un futuro igual al de su pasado. Nadie esperándolo en casa, nadie quién le diera una cálida bienvenida, no había motivo por el cual llegar a salvo a su casa. Baekhyun estaba demasiado ocupado con su novio, JongDae no era tan cercano, no confiaba tanto en él como para desahogarse con él.

Mierda, estaba solo.

La puerta se abrió, Kyungsoo pensó que debía ser su padre, porque su madre seguía en el hospital.

No… Espera, su padre había vuelto al trabajo.

-Hyung, no te hagas esto. Debes volver al instituto… Te extraño- Ahí estaba JongIn, mirándolo con ojos preocupados, sentado en la cama, a su lado. Kyungsoo se incorporó mirándolo de cerca, creyendo que su mente lo estaba engañando -¿Hyung?-

Kyungsoo estiró su mano y acarició el rostro de JongIn, era igual a como lo recordaba. No importaba lo mucho que se esforzara, nadie tenía una piel igual a la del moreno, lo había comprobado. Entonces la persona que estaba ahí era JongIn.

-¿Tus compañeros también han faltado JongInnie?- Le preguntó con un tono cálido, que solo podía ocupar con ese chico que era como un niño, uno muy tierno.

-No, en realidad últimamente todos han venido a clases, pero hyung no viene y me siento solo sin hyung- Le confesó manteniendo la mirada –Sé que esto es muy doloroso, pero hay personas que quieren que retomes tu vida y vuelvas a sonreír-

-¿Es así?-

El menor se dio cuenta de que no estaba llegando a nada, se preguntó si Baekhyun lo había visitado como le dijo que lo haría, pero recordó que su novio controlador le había dicho que si no se juntaban esa semana terminarían. Pensó que Kyungsoo debió sentirse muy solo en esos momentos, y eso le provocaba un dolor en el pecho.

-¿Por qué lloras?-

-Porque hyung debió sentirse muy solo, pero no quiero que hyung se sienta así. Hyung me importa mucho, no quiero que piense que a nadie le importa si comió, o si lleva abrigo, o si llegó bien a su casa. A mí me importan esas cosas porque Kyungsoo hyung es alguien único y especial para mí-

Kyungsoo abrazó al menor y éste correspondió más fuerte, pegándolo a su pecho. Era la primera vez en mucho tiempo que alguien abrazaba al mayor de esa manera, como diciendo “Te necesito”.

-Perdón por no ser mejor dongsaeng- Dijo JongIn. Kyungsoo negó mientras acariciaba el cabello de JongIn.

-Contigo es suficiente- Le dijo -¿Sabes?... –




… Estoy feliz



No hay comentarios:

Publicar un comentario